A 5 años del cobarde asesinato del presidente municipal de Pungarabato, Ambrocio Soto Duarte, el caso sigue durmiendo el sueño de los justos, por parte de los organismos encargados de la investigación y procuración de justicia.
Era la noche del sábado 23 de julio, del 2016, cuando la noticia corrió como reguero de pólvora: “acaban de matar a Bocho”, sin haber cumplido un año de gobierno en su administración, que marcaba el periodo 2015- 2018.
Con su muerte, los proyectos para el municipio de Pungarabato, se fueron a la basura, porque habría dicho que su administración, le daría un enorme realce a Ciudad Altamirano y las comunidades, iniciando por la avenida principal, Lázaro Cárdenas.
Su aniversario luctuoso, pasó desapercibido, pese a que durante el cortejo funebre, rumbo al panteón, hubo varias personas que sufrieron crisis, por el doloroso momento.
En el mes de septiembre, se presentaron al panteón, peritos (?) de la entonces policía federal, a exhumar y cadaver de Bocho y su cuñado, que murio junto con el, en la balacera: la intención, era indagar, las causas de su muerte.
A 5 años de tu asesinato, Ambrocio Soto Duarte: descansa en Paz.
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